Acrílico sobre tabla.
Encargo de un cuadro basado en un sitio real de un jardín japonés. He querido representar por planos de color las diferentes estructuras que forman los arboles usando además, las losetas caprichosamente distribuidas por el suelo. La atmósfera nos da un toque irreal del espacio representado.
Un sabor agridulce acompaña la publicación de esta entrada, no puedo evitar, al ver este idilico jardin, pensar en los momentos tan dificiles que esta pasando el pueblo japonés al que tan misteriosamente me siento ligado. Desde mi pequeño espacio, al igual que este jardín, les mando todo el ánimo y la fortaleza de las que han hecho acopio tantas veces en su historia.
Amén
ResponderEliminarMe encanta este cuadro. También me solidarizo contigo y con todo un pueblo que sufre estóicamente.Este pueblo es un ejemplo de madurez y equilibrio.
ResponderEliminar